Ciencia x Fogones: el blog
Red beans chili peppers
Ya veis, Félix pone la guindilla y yo el plato. Él es así, le gusta volcarse...
Y su receta de referencia, su fondo de armario (o mejor dicho, de despensa) son las alubias.
Ingredientes
- ½ Kg. de Alubia de Tolosa,
- 1 cebolla pequeña,
- 5 cucharadas de aceite de oliva,
- sal,
- 1,5 l. de agua, aproximadamente.
Primero introduciremos las alubias en una cazuela con agua fría, aceite de oliva y la cebolla finamente picada.
Luego pondremos la cazuela a fuego fuerte hasta que rompa a hervir. A continuación bajaremos el fuego y mantendremos as alubias con un hervor suave durante 2 horas y media aproximadamente. A medida que va avanzando la cocción, y si es necesario, añadiremos agua.
Cuando las alubias estén cocidas, salaremos y mantendremos el fuego muy suave durante unos minutos.
Antes de servir, dejaremos reposar fuera del fuego para que espese el caldo.
Y aquí es donde aparecen las guindillas. Momento de protagonismo para Felix, que os contará cosas como que...
El picante sólo lo es para los mamíferos. La sabia naturaleza hace que las aves ni lo noten, de manera que puedan engullir sus semillas ayudando a su distribución, al ser depositadas lejos de la planta madre.
O que si sufrís los rigores no bebáis agua, ni lleguéis al extremo de echar mano de un extintor. El causante del picor es la capsaicina, y se diluye en elementos grasos, como la leche, o incluso el aceite.
Y hasta aquí una nueva muestra de que la cocina con ciencia sabe mejor.
El picor de los alimentos se mide a través de la escala de Scoville. En la cima de esta clasificación, el Carolina Reaper, considerado el ají más picante del mundo con más de 2 millones de SHU (Scoville Heat Units). ¿Te atreves a probarlo si te digo que un jalapeño no supera los 8.000 SHU?